martes, 31 de marzo de 2020

Ayudar a los demás



Una buena causa



Hemos leído hoy en el "Diario del AltoAragón", un artículo de Elena Fortuño en el que nos da una información que nos llena de orgullo y satisfacción, porque habla de la generosidad de un joven de Campo.  
Se trata de Enrique Subías, un joven estudiante de nuestro pueblo que está cursando la carrera de ingeniería informática, y que ha decidido aprovechar el confinamiento en casa y sus conocimientos, para ayudar a los demás. Para ello, ha comenzado ocupándose de las necesidades de las personas mayores alojadas en la Residencia de la Tercera Edad. 

Enrique, ha fabricado con su impresora 3D treinta pantallas faciales que ha podido donar ya a la residencia, así también como mascarillas de tres capas, que ha conseguido a través de las redes.

¡Gracias por tu generosidad, Enrique!  

 

viernes, 27 de marzo de 2020

Desde casa


¿Cuándo saldremos, mamá?


miércoles, 25 de marzo de 2020

Como en la vida misma


Casi cuatro siglos después...


Leyendo "El miedo en Occidente", de Jean Delumeau, sorprende constatar que muchas de las cosas que cuenta,  concretamente las referidas a la peste, epidemias, etc. son bastante semejantes a las que ahora estamos viviendo. Tomemos por ejemplo la citación que hace de un escrito del clérigo luso D. Defoe, que hace ya casi cuatrocientos años decía:
"Separados del resto del mundo, los habitantes se apartan unos de otros en el interior mismo de la ciudad maldita, temiendo contaminarse mutuamente. Se evita abrir las ventanas de la propia casa y bajar a la calle. Se esfuerzan por aguantar encerrados en casa con las reservas que han podido acumular. Si a pesar de todo, hay que salir para comprar las cosas indispensables, se imponen las precauciones. Clientes y vendedores de artículos de primera necesidad solo se saludan a distancia y ponen entre ellos el espacio de un ancho mostrador..."
"De este modo, en la ciudad sitiada por la peste, la presencia de los otros no es ya un consuelo. La agitación familiar de la calle, los ruidos cotidianos que ritmaban los trabajos y los días, el encuentro del vecino en el umbral de la puerta, todo esto ha desaparecido". 

En el libro se habla también de San Sebastián, al que se invocaba ya a partir del siglo VII buscando protección contra las epidemias, aunque fue desde 1348 cuando su culto se extendió, y en ninguna iglesia rural o urbana faltaba la imagen del santo.
En Campo hay una ermita dedicada a San Sebastián, situada en una de las entradas del pueblo. En estos días de reclutamiento en casa, cuando la cabeza da los paseos que no pueden dar las piernas, me acerco de vez en cuando por allí y le pido al santo que nos ayude a todos. El día que esta situación acabe, me gustaría pasar por la ermita y rezar un rosario, para darle las gracias (espero) por haber cuidado de nosotros. Si queréis acompañarme... aunque me temo que aún tendremos que esperar un tiempo.  

domingo, 15 de marzo de 2020

Una maestra de Campo


Hasta siempre, Teresa


El pasado día 12 de este mes de marzo, falleció en Barcelona doña Teresa Ramón Palacio, a los 97 años. Había nacido en Huesca el 16 de diciembre del año 1922.
Siempre que las personas de Campo nos referimos a ella, le damos el título de doña, porque fue maestra nacional en nuestro pueblo durante 10 años y eso merece un respeto. Se marchó, para ejercer su profesión en Estadilla, en septiembre de 1956. Según nos contó en alguna ocasión, el tiempo que pasó en Campo fue una época muy feliz para ella, porque nada más tomar posesión de su plaza fue cuando se casó. 
Doña Teresa ha sido una incansable escritora, poeta y compositora de jotas, campos en los que ha obtenido muchos éxitos, tanto a nivel popular como institucional, habiendo recibido a lo largo de su vida numerosos premios y galardones.
Además, la actividad de esta mujer extraordinaria y el amor a su tierra se han evidenciado también en su buena disposición y generosidad en cualquier iniciativa a favor de Aragón, colaborando siempre que se le ha solicitado su ayuda. Buena prueba de ello ha sido su participación en las actividades del Centro Aragonés de Barcelona, ciudad en la que vivió desde 1979, siendo un éxito suyo el haber conseguido el privilegio de que para la fiesta de Santa Agueda, los aragoneses puedan asistir a la misa oficiada en la capilla de Santa Agueda del Palacio de Jaime I.
Teresa Ramón era,  además de inteligente y con una memoria privilegiada, una persona sencilla y entregada a los suyos. La recordaremos.
Un año me felicitó la Navidad con el poema que os muestro a continuación, que escribió cuando estaba en Campo, así es que aparecemos al lado de su nombre casi como "coprotagonistas"... Gracias, Teresa. 


domingo, 8 de marzo de 2020

La fiesta de Carnaval

o
Nada es lo que parece



Os ofrecemos alguna de las fotos que nos han enviado desde Campo. No conocemos el nombre de todos los autores o autoras, esperamos que no les importará compartirlas con todos nosotros. ¡Gracias!