martes, 10 de enero de 2017

Los Auset (Aused)


Un caso de dación personal 




En el año 1728 Bartholomé debía tener unos 28 años de edad y vivía en Plan, donde desempeñaba el oficio o profesión de “llamador público”, que bien podría corresponder al de pregonero. Hemos encontrado esta información en el expediente de Infanzonía de los Ballarín, de 1727, según la relación hecha por el notario don Pedro Juan Altemir de Campo, en uno de sus desplazamientos a ese lugar. Refiere en dicho documento:
"Dei Nomine. Amen. Sea a todos manifiesto que llamados y convocados a Consejo General y Abierto, de los Alcaldes, Regidor, Procurador, Síndico, Consejeros, singulares personas, vecinos y habitadores de la villa de Plan, por mandamiento de dicho Regidor abajo nombrado (en ausencia de Andrés Falceto) y llamamiento de Bartholomé Aused, llamador público de la misma villa, el cual en dicho Consejo hizo fe y verdadera relación, a mi, Pedro Juan Altemir, notario, presentes los testigos infraescriptos, que él, de mandamiento de dicho Regidor actual, había llamado a dicho Consejo General y abierto, a son de campana tañida por él, para los presentes día, hora y lugar: Y así llamado y ajuntado en las casas vulgarmente dichas de la villa, en una sala alta que hay en ellas, en donde otras veces para conferir y otorgar cosas arduas, pactos concejiles, dicho Consejo General es acostumbrado congregarse...".
Bartholomé debió casarse por estas fechas con Manuela Ferrer y uno de sus hijos fue Domingo, al que probablemente le pusieron ese nombre porque tenían como pariente a un Domingo Aused, en Sin.
Cuando llegó a la edad de contraer matrimonio, Domingo Auset Ferrer lo hizo con María Montaner Escalona, hija de Martín y de Cathalina, en Bielsa, en la iglesia de Ntra. Sra. de los Angeles, el día 28 de agosto de 1752. Pero, antes de esta boda ocurrió algo importante en la vida de Domingo. Y es que en esta historia familiar de los Auset podemos encontrar un acto jurídico típico de Aragón: la donación. En este caso se trata, de acuerdo con la terminología de Joaquín Costa, de una dación personal. Veamos en que consistía:
Era un hecho frecuente en los pueblos de los Pirineos, más concretamente en Jaca, Boltaña y partidos limítrofes que, una o varias personas (a menudo un matrimonio) que recibían el nombre de donados, hicieran donación de todos sus bienes a una persona extraña a su familia, con la obligación por parte del beneficiado, llamado arrogador, de cuidarle, o cuidarles, mientras vivieran. En algunas ocasiones, el donado carecía de capital y aportaba sólamente su trabajo.
En el caso concreto que estamos relatando, se trata de una Donación hecha en Plan, el veintiocho de agosto de 1750, a favor de Domingo Auset. Lo curioso es que Domingo Auset era mancebo y la donante Susana Nau, una joven de veinticuatro años y, aunque es verdad que no había ninguna regla establecida sobre la diferencia de edad que debía existir entre el donado y el arrogador, no deja de ser una situación poco habitual dada la juventud de ambos.
"Mujer escribiendo carta". Terborck
El documento fue otorgado ante el notario Pedro Verastegui. Los términos utilizados en su redacción son los típicos de este tipo de actos, cuajados de frases hechas, propias de una terminología específica, pero que hoy día nos llegan como un mensaje muy entrañable, incluso con cierta “poesía”. Ciertamente, es una donación muy especial. Dice, entre otras cosas:
"
En la villa de Plan a veinte y ocho de agosto de 1751: Que yo, Susana Nau, mujer moza, natural de la villa de Plan:
Por cuanto me hallo en edad de veinticuatro años, poco más o menos, sin padres, ni hermanos, queriéndome apartar en algún modo de la vanidad de este mundo, sin querer contraer matrimonio, y por este motivo no poder acudir por mi persona a la administración de mis bienes, y que para pasar mi vida con alguna quietud y comodidad no he hallado, ni tengo otro más conforme medio que asegurar mi sustento para durante mi vida en compañía de Domingo Auset, mancebo vecino de esta villa, en quien he hallado todo el consuelo y asistencia que podía desear, desde que me acogió en su compañía,
Por cuanto en esta consideración deseo asegurar la misma asistencia que hasta de ahora he experimentado en dicho Domingo Auset, para durante mi vida natural, y para fenecida ella se me haga por él mi entierro y sepultura, según costumbre de la Parroquia de la villa de Plan y personas de mi calidad,
Por que para este fin tengo tratado y convenido con dicho Aused el que se obligará a mantenerme sana y enferma en su compañía, por toda mi vida haciendo y otorgándole donación y razón de todos mis bienes:
Deseando practicar este medio por considerarlo muy ventajoso y acomodado a la quietud y descanso que deseo tener el tiempo que Dios mantenga mi vida.
Por tanto, y por otras justas causas que a ello me han movido de mi buen grado, libre y espontánea voluntad, y en la mejor forma que hacerlo puede y digo hago en favor de dicho Domingo Aused, para sí y sus habientes, derecho para luego de presente Donación, pura, perfecta e irrevocable que he hecho entre vivos de todos mis bienes muebles, sitios, créditos, derechos, instancias y acciones donde quiera habidos y por haber, que aquí los quiero dejar por nombrados y firmados, calendados, especificados y confrontados según Fuero de Aragón, y como más convenga.
Texto con los cargos y condiciones siguientes y no sin ellas:

Primero, que durante mi vida me haya de tener en su compañía dándome los alimentos iguales a los suyos y vistiéndome con decencia.
Item encargo de que cuando muera se me haya de hacer por mi alma los sufragios a uso y costumbre de la parroquia de Plan y personas de mi calidad.
Item encargo de que se me aya de respetar como a señora mayora y usufructuaria, que me reservo el serlo de los bienes que dono, con la condición de convertir el usufructo de ellos en beneficio de esta casa y en compañía de dicho Domingo Auset.
(...) Item para mayor firmeza y validación de esta mi Donación, dejo por parte y derecho de legítima en mis bienes a mis parientes y demás personas que parte o derecho de legítima en mis bienes pudieren pretender y alcanzar, cada diez sueldos jaqueses, la mitad por bienes muebles y la otra por bienes sitios, con los cuales mando se tengan por contentos y pagados, de cuanto en mis bienes pudiere pertenecerles”.
La gran incógnita es saber qué le ocurría a Susana, por qué no se quería casar, por qué razón a los veinticuatro años deseaba renunciar a "la vanidad del mundo"... ¿tendría, quizás, alguna enfermedad incurable? Además teniendo parientes, tal como se menciona en el documento, ¿por qué no recurría a ellos? En fin, no deja de ser ésta una situación curiosa, en la que una “mujer moza” se dona a un mancebo... Sea como fuere, la nueva situación económica con la que se encontró Domingo Auset Ferrer gracias a esta aportación, le debió ser muy beneficiosa porque, al año siguiente, concretamente el 28 de agosto de 1752, contraía matrimonio con María Montaner Escalona, como ya hemos mencionado antes. Los testigos de la boda fueron tres: José Verastegui, Miguel Buerba Solans y Josef Mascaray.
Del matrimonio de Domingo Auset Ferrer y María Montaner nacieron (son los datos que tenemos, puede haber más), en San Juan de Plan:
1°) José Aused Montaner, que fue el mayor de los hermanos según consta en la información que nos da la Dispensa Papal otorgada a su hermano Domingo, y que, probablemente recibió el nombre de José por alguno de los dos Josés que actuaron como testigos en el matrimonio de sus padres (José Berastegui o José Mascaray). José Auset se casó con Josefa Pallaruelo Abad.
2°) Rosa Aused Montaner, nacida el 20 de febrero de 1763 y que se casó con Antonio Bruned Roger el 4 de junio de 1792.
3°) Domingo Pedro Aused Montaner, fue bautizado en la iglesia de San Esteban de Plan el 15 de octubre de 1765, siendo sus padrinos Pedro Ballarín y Miguela Aused. Se casó con Raymunda Bayla Nerín en Saravillo, el 17 de octubre de 1791.

Domingo Auset Ferrer se casó en segundas nupcias con Teresa Duesso Grima, en Serbeto, el año 1768.
4º) Catalina Auset Montaner se casó en San Juan el 3 de abril de 1783 con Pascual Pallaruelo Palacín.
5º) María Auset Montaner, contrajo matrimonio con Miguel Bielsa el 6 de octubre de 1783.

José Auset Pallaruelo, que se instaló en Campo, era descendiente del primero de los hermanos, José Auset Montaner.


5 comentarios:

  1. ¡Muy interesante!

    Antonio Ferragut

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  2. Luis Auset: te felicito por el blog!

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  3. Gracias a los dos, Antonio y Elena, sóis muy amables por escribir.

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  4. ¿Dónde se encuentra tu pueblo? ¿Cómo puedo ir allí?

    Laura


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  5. Hola, Laura, el Campo del que hablamos en este blog, es el de la provincia de Huesca. Hay otros Campo en España. Si te sirve de referencia, está situado a medio camino en la carretera de Graus a Benasque, en un valle muy bonito. El pueblo es tranquilo y está bien cuidado. Tiene sus pros y sus contras, como todas las cosas, pero creo que no decepciona. Si un día lo visitas, de todos modos, piensa que aparte de lo que veas, cada casa guarda detrás de su puerta muchas historias y para los que las conocemos un poco (no es ningún mérito, el pueblo es pequeño) eso es lo que lo convierte en algo único y entrañable.
    Gracias por tu interés. Un abrazo.

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